Con unas mascarillas oscuras cubriendo la mitad de sus rostros, chompas gruesas por el intenso frío, mochilas con alimentos y en sus manos unas fundas con frutas. Es así como caminan los esposos Pugo-Carrión hacia Loja.
Ellos temen contagiarse del virus, pero su fe a “La Churonita” es más fuerte que la enfermedad. Salieron ayer desde la parroquia Cumbe (sur de Cuenca) alrededor de las 09:30, con el propósito de estar en el Santuario de la Virgen de El Cisne en tres días o menos.
Caminan a un costado de la vía Cuenca-La Jarata-Loja enfrentando al frío, neblina y el riesgo de ser atropellados por algún vehículo -que pese a los límites de velocidad establecidos- circulan en altas velocidades.
Diego Pugo, de 40 años de edad, dijo que quieren darle las gracias a la Virgen por tenerlos bien, sin contagiarse en los más de cinco meses de la emergencia. Comentó que son seis años que mantienen esta tradición religiosa, “vamos con todas las protecciones, más aún, que estamos bien, y no como otras personas que están en los hospitales”.
Mientras su esposa, Alicia Carrión, de 27 años, expresó que existe muy poca gente caminando hacia Loja a diferencia de otros años por la crisis sanitaria. Recalcó: “Dios nos da las fuerzas para seguir caminando”.
Restricciones
En el sector de San Vicente de Gañadel, parroquia Cumbe, está una tienda que por años sirve de encuentro y paso de los romeriantes.
Rosa Villa, dueña del negocio, comentó que disminuyó el número de romeriantes que desde el 28 de agosto de cada año acostumbraban a caminar hacia Loja. “En la madrugada de ayer salieron 10 personas, lo sé, porque me golpearon la puerta para que les venda cafecito por el frio”.
Este es el panorama en estos días en la vía hacia Loja. Se prevé que desde hoy incrementen un poco los romeriantes, ya que muchos prefirieron quedarse en sus casas por las restricciones del COVID-19. (BPR)-(I)
Aprueban que “La Churonita” haga sobrevuelo en Cuenca
Los devotos azuayos a la Virgen de El Cisne recibirán su bendición la próxima semana. La Arquidiócesis de Cuenca tramita que la sagrada imagen de «La Churonita» sobrevuele la capital provincial.
Las severas restricciones por el COVID-19 limitaron los festejos en el presente año. La tradicional romería se la suspendió al igual que la presencia de la sagrada imagen en la Catedral de Loja que albergaban a miles de fieles, en especial de Cuenca y otros cantones.
Esto, motivó a que la Arquidiócesis gestione ante su par de Loja el sobrevuelo por la ciudad, explicó monseñor Marcos Pérez, obispo de Cuenca.
De acuerdo con Pérez, existe la posibilidad de llegar a otros de los cantones del Azuay entre el 7 y 12 de septiembre, ya que se espera por la confirmación de la fecha exacta de parte del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, quienes prestarán el helicóptero para el efecto.
Se pidió inicialmente que el sobrevuelo se realice el 8 de septiembre -fecha en la que se conmemora la «Natividad de la Virgen», donde los devotos azuayos viajan a Loja para honrar a la patrona- sin embargo, queda a disposición del Ejército, informó monseñor Pérez.
Autorización
La Arquidiócesis de Loja autorizó el traslado de la imagen de la Virgen que llegará acompañada de sacerdotes. Así lo confirmó monseñor Walter Heras, obispo de Loja.
Heras aseguró que han existido solicitudes de diferentes provincias para que la imagen de la Virgen los visite, siendo Azuay la primera favorecida. (I)
DETALLE
En el Santuario de la Virgen de El Cisne se permiten las visitas bajo estrictas medidas de control y bioseguridad. Se han establecido horarios restringidos, tanto en la mañana como en la tarde.