La Unión Nacional de Periodistas (UNP) exigió este viernes acciones para frenar ataques a periodistas en Ecuador, donde detecta una «campaña de acoso, desprestigio, amenazas e intentos de intimidación».
«La campaña de acoso, desprestigio, ataques, amenazas e intentos de intimidación a periodistas continúa en ascenso en Ecuador, incluso valiéndose de la Justicia y de acciones poco transparentes, hechos inadmisibles en una sociedad democrática», señala en un comunicado.
Anota que desde noviembre pasado se han registrado nuevas acciones de agresión, intimidación y obstaculización del trabajo periodístico, «en un claro intento de callar a los comunicadores, más aún a quienes denuncian casos de corrupción».
DENUNCIAS, ACOSO, DISPAROS
La UNP detalla que, por disposición de un agente fiscal, la periodista Dayanna Monroy, del canal de televisión Teleamazonas, debe rendir versión ante una denuncia por supuesta revelación ilegal de base de datos, «presentada en su contra por un exmandatario, que también es candidato a asambleísta y quien el año pasado ya amenazó a la periodista y nuevamente lo hace, dentro de un acoso legal».
La UNP añade que Carlos Rojas, presentador de la televisión Ecuavisa, «fue atacado en redes sociales por referirse en Twitter al reportaje publicado por la Revista Semana sobre los archivos encriptados de Andrés Vanegas, alias Uriel, el comandante del ELN, sobre un supuesto financiamiento a la campaña del candidato Andrés Arauz», que aspira a la Presidencia de Ecuador.
Además, la jueza Melanie López Vargas, sin audiencia, negó la acción de protección con medida cautelar en contra del Consejo Nacional Electoral, interpuesta por las periodistas de GK Ecuador, Isabela Ponce y María Sol Borja, por la decisión del ente electoral de no permitir el acceso de medios digitales al Centro de Difusión de Resultados este domingo, día de las elecciones generales.
La UNP agrega que el periodista Alejandro Lalama, de Diario La Prensa, de Chimborazo, «fue agredido por simpatizantes del candidato presidencial de la lista 1 (Arauz), cuando intentaba cubrir la visita del político a esa provincia».
Por otra parte, un individuo disparó 8 tiros contra la periodista de Radio Sucumbíos y ex directora de Comunicación del Consejo Provincial Marilú Capa, quien ahora se debate entre la vida y la muerte, reza la nota gremial.
Y añade que la presentadora de televisión y locutora cuencana María Elisa Padilla, junto a su abogado, denunció que desde diciembre recibe amenazas de muerte.
En diciembre, dos tacos de dinamita fueron lanzados al balcón de la vivienda del periodista de la provincia de El Oro y director del medio digital MP Noticias, Mario Pinto, añade sin más detalles.
Wilson Cabrera, corresponsal de Teleamazonas en Morona Santiago y director de las plataformas periodísticas Conectados y Verificado, «denunció que recibió amenazas del Comisario Nacional de Policía del cantón Santiago (Morona Santiago), Iván Rivadeneira Torres, quien le advirtió que interpondrá acciones legales contra él por denuncias hechas en su contra», relata la UNP.
La Unión Nacional de Periodistas del Ecuador «se solidariza con todos los comunicadores del país y su labor por desentrañar las tramas de corrupción, señalar a los involucrados y mantener informada a la ciudadanía», apunta en el escrito.
La UNP «exige a todas las instituciones del Estado y Gobierno que cumplan con su obligación de precautelar y garantizar el trabajo e integridad de los periodistas, deber legal y moralmente ineludible, no solo por ser parte de estándares internacionales, sino por el derecho de la población a estar adecuadamente informada».
De no arbitrar inmediatas acciones y permitir la impunidad en las agresiones a periodistas, «el Gobierno se convertirá en cómplice de los agresores y acosadores», señala la nota suscrita por la presidenta de UNP, Mariana Velasco. EFE
