Noche y remontada de ‘Champions’ en el Santiago Bernabéu
Llegó el Real Madrid a la vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones frente al París Saint-Germain con la necesidad de remontar el 1-0 en contra de la ida y los planes surtieron efecto. Jugadores y técnico alentaron a la afición en los días previos, éstos respondieron a la llegada del autobús al Santiago Bernabéu y también dentro de un terreno de juego en el que los locales demostraron que nunca se les puede dar por muertos.
Centenares de personas se agolparon en la plaza de Sagrados Corazones y en sus inmediaciones para recibir al conjunto blanco en su llegada al estadio. Bengalas y gritos de “¡sí se puede, sí se puede!” y “reyes de Europa” para calentar una noche que pareció torcerse tras la primera mitad, pero que acabó siendo otro momento para el recuerdo de los seguidores del Real Madrid.
Una afición que comenzó ovacionando al francés Kylian Mbappé cuando sonó su nombre por megafonía al anunciar la alineación titular del PSG con la esperanza de que este verano puedan disfrutarle cada fin de semana, pero que nada más arrancar el encuentro se centraron en los que ahora son suyos.
Los futbolistas del equipo blanco bien lo notaron y salieron más enchufados que ningún otro día. Presión alta, asfixiante al equipo francés para intentar un gol tempranero que igualara una eliminatoria que, ni mucho menos, estaba perdida.
Aunque eso pareció con el tanto de Mbappé en la primera mitad, pero ya se sabe que “90 minutos en el Bernabéu son muy largos”. Que se lo digan a un PSG que se vio superado por el escenario, se le desarmó el plan en los 17 minutos que tardó Karim Benzema en darle la vuelta a la eliminatoria.
Aprovechó dos errores infantiles de los parisinos, en el primero con el fallo en la salida de balón de Donnarumma y en el tercer tanto en un mal pase atrás de Marquinhos nada más sacar de centro después de que el Real Madrid igualase la eliminatoria.
Y a partir del minuto 78, con el 3-1, los de Pochettino se descompusieron a la par que la afición del Real Madrid demostró que en los partidos grandes cambia su cara por completo. El mejor ambiente de toda la temporada en un momento clave, porque la ‘Champions’ es diferente para los “reyes de Europa”, que tienen 13 trofeos de esta competición en sus vitrinas.
Un ambiente que se mantuvo durante más de 15 minutos después de que el colegiado decretara el final del partido. No se movió un alma, nadie estaba preocupado por salir pronto y evitar atascos y sí por guardar en su retina y en sus móviles otra noche histórica del Real Madrid.
Los jugadores se lo agradecieron con gestos de rabia y acercándose a ambos fondos para aplaudir y gritar con los suyos mientras seguían los cánticos de celebración.
Una alegría que se puede resumir en una imagen, la de Ancelotti abrazando a Benzema con una cara de felicidad plena de alguien que no encuentra las palabras para demostrar su agradecimiento. Lo tuvo fácil Roberto Martínez, seleccionador de Bélgica, que estuvo presente en el Santiago Bernabéu como observador técnico de la UEFA, para dar el premio de mejor jugador del partido al delantero galo. EFE