Primer año de Lasso: una relación trabada con la Asamblea

Guillermo Lasso Mendoza, presidente del Ecuador y principal figura del movimiento político Creando Oportunidades (CREO), cumple su primer año de gestión este 24 de mayo de 2022.

En lo político Lasso inició su mandato con un fallido acercamiento con Rafael Correa, expresidente del Ecuador, en el que el mediador fue Jaime Nebot, principal líder del Partido Social Cristiano (PSC).

A partir de eso Nebot tomó distancia de Lasso y al pasar los meses se ha convertido en uno de sus principales críticos, especialmente, en temas económicos y de seguridad.

Luego Lasso también estuvo involucrado en la disputa por la Presidencia de la Asamblea Nacional. El movimiento Unión por la Esperanza (UNES), afín a Rafael Correa, intentó que Pierina Correa sea la presidenta.

Sin embargo, CREO, el movimiento de Lasso, logró acuerdos con otras fuerzas políticas y finalmente consiguieron que Guadalupe Llori, del movimiento de Unidad Plurinacional Pachakutik, llegue a este espacio.

A pesar de no tener una mayoría Lasso consiguió que a finales de 2021 el Legislativo no niegue ni archive el proyecto Ley Urgente de Desarrollo Económico y Sostenibilidad Fiscal.

Por eso, esta iniciativa legislativa entró por el ministerio de la ley, lo que generó cuestionamientos entre los correístas, pues permitieron que entre en vigencia esta ley a la que habían criticado largamente.

Luego de eso Lasso no ha logrado acuerdos firmes con los diferentes bloques legislativos para que se aprueben otras normativas como por ejemplo La Ley de Inversiones.

De allí en más Lasso ha denunciado un bloqueo constante a sus propuestas legislativas, lo que le resta posibilidades de gobernar con el apoyo del Legislativo.

Lasso en este primer año tampoco ha logrado consolidar una relación de apoyo político con los alcaldes de las principales ciudades del país. Asimismo, no tiene una buena relación con los grupos sociales.

Desorden absoluto en la voluntad política

Para Manuela Cordero, docente e investigadora de la Universidad del Azuay (UDA), “no se puede separar el clima político de la realidad nacional en su conjunto”, para analizar el primer año de gestión de Guillermo Lasso.

Y acotó: “en ese sentido la gestión de la vacunación no puede quedar de lado, eso nos ha dado mucha tranquilidad para que en el clima general los ciudadanos podamos seguir adelante con nuestros planes…”, explicó.

A criterio de Cordero estos primeros 12 meses han sido el resultado de los últimos 20 años de la política en Ecuador. Considera que hay desorden absoluto en la voluntad política de todos los actores para impulsar el desarrollo del país.

De acuerdo con Cordero, hay una serie de intereses determinados por varios grupos, como los económicos, que son los que representa Lasso, como por ejemplo, la minería, donde no hay el compromiso para respetar las consultas.

Cordero cree en la Asamblea Nacional prevalece un constante desorden en torno a las decisiones importantes y trascendentales para el país, en lo económico y justicia. Considera que tampoco hay voluntad para permitir la gobernabilidad.

A decir de esta catedrática hay poderes que están relacionados inclusive con mafias delictivas y de tráfico de drogas, que se ve reflejado en una ola de violencia que es sistemática y organizada.

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