El diálogo entra en una semana clave

Hasta el viernes, grupos indígenas y Gobierno deben cerrar negociaciones en cuatro mesas.

El viernes vence el plazo que las organizaciones indígenas le dieron al Gobierno para concluir las negociaciones en las cuatro mesas de diálogo que siguen pendientes, de un total de diez que se acordaron crear tras el paro nacional, de las cuales, cinco todavía no se han instalado y solo en una ha salido “humo blanco” de forma definitiva.

Pese a que todavía restan 40 días para concluir los 90 días que las organizaciones y las autoridades gubernamentales se propusieron para concluir las mesas de diálogo, el plazo fatal para las negociaciones de las cinco primeras mesas lo impuso Leonidas Iza, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas (CONAIE), quien la semana pasada rechazó la demora y la falta de acuerdos, por lo que se estableció un nuevo cronograma.

Las mesas que se deberán concluir esta semana son: Energía y Recursos Naturales, que se reinstaló ayer; la de Focalización del Subsidio a los Combustibles, que arrancará mañana; Control de Precios y Fomento Productivo.

Aunque la de Banca Pública y Privada fue clausurada tras la firma de un acta, Iza advirtió que, mientras no se vean los resultados de la condonación y reprogramación de las deudas, no se la dará por clausurada, por lo que también se la tratará esta semana.

Samuel Lema, presidente del Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicos del Ecuador (FEINE), se mostró preocupado por la falta de avances en las mesas de diálogo y puntualizó que las protestas como la anunciada por el Frente Unitario de Trabajadores (FUT) para el próximo 21 de septiembre se seguirán produciendo, ante la falta avances en las negociaciones.

“El diálogo debe tener resultados, pero vemos que no existen, hemos abierto cinco mesas y solo en la de Banca Pública y Privada hemos tenido un poco de avance, pero en el resto no hemos avanzado. Nosotros hemos puesto todo de nuestra parte, pero ahora ya depende del Gobierno Nacional”, afirmó Lema.

Por su parte, Gary Espinosa, presidente de la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin), recalcó que, sea cual fuere el resultado obtenido hasta el viernes, todas las mesas pendientes serán clausuradas, para desde el próximo lunes iniciar con el tratamiento de las cinco mesas pendientes de inaugurar.

“Con acuerdo o sin acuerdo, cerraremos esas mesas de forma definitiva, punto”, afirmó Espinosa, quien anticipó que, por lo menos en dos mesas: la de Focalización de los Combustibles y la de Fomento Productivo, existen avances importantes y que solo falta que el Gobierno “ceda un poco” en cuanto a presupuestos, para poder clausurarlas.

Pero para Francisco Jiménez, ministro de Gobierno, el Régimen ha cedido bastante en todas las mesas, principalmente la de Banca Pública y Privada, donde se han otorgado beneficios por más de 400 millones de dólares y se le ha condonado la deuda a más de 26 mil personas.

Mientras que la mesa más conflictiva ha resultado ser la de Control de Precios, en la que las organizaciones indígenas exigen que se imponga costos fijos a más de 100 productos, a lo que el Gobierno se niega, pues muchos de estos, sobre todo los industrializados obedecen al mercado internacional y fijar un precio por decreto podría afectar el comercio en el país.

FEINE con posición contraria

Samuel Lema, presidente de la FEINE, dio a conocer que continuarán negociando con el Gobierno.

Contrario a lo que manifestó Leonidas Iza, que amenazó con dar por concluido el diálogo si hasta el viernes no se obtienen resultados en las cinco mesas pendientes, Samuel Lema puntualizó que, de parte de la FEINE continuarán negociando hasta que concluya el plazo inicial. “Vamos a respetar los 90 días que son”, dijo.

Por su parte, Margarita Arotingo, líder de la Fenocin, recalcó que en su organización incluso están conscientes de que en 90 días no se van a solucionar los problemas del país, por lo que los diálogos sobrepasarán el 12 de octubre, fecha en que se planea clausurar todas las mesas.

“Los problemas son de gobiernos anteriores, que se acarrean hace más de 40 años, no podemos coincidir en todo, en las cosas que coincidimos vamos a concluir, sino vamos a seguir conversando, porque estamos conscientes de que no vamos a conseguir todo”, afirmó Arotingo. (ASM)-(I)

REM

REDACCION EL MERCURIO

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