El próximo 22 de junio, las instituciones educativas públicas cumplirán sus 200 días de actividades académicas, y con ello se dará por terminado el año lectivo 2022-2023 en la Sierra y la Amazonía.
Sin embargo, los profesores y los establecimientos de educación ya no están pensando en lo que terminará, sino más bien en lo que se avecina en dos meses: el regreso de los periodos trimestrales, la eliminación de los exámenes remediales y de gracia, y un nuevo proceso educativo que estará enfocado en remediar los vacíos en el aprendizaje de los estudiantes.
Y es que, con el año lectivo 2023-2024 llegarán algunos cambios tras las reformas que se hicieron a la Ley Orgánica de Educación Intercultural (LOEI).
La primera modificación que se verá es en el inicio de clases. A diferencia de los años escolares anteriores, este empezará el 22 de agosto de manera escalonada.
Ese día volverán a las aulas los estudiantes de Bachillerato e Inicial, el 23 de agosto será el turno de los alumnos de primero, octavo, noveno, décimo de Educación Básica, mientras que el 24 de agosto ingresarán los de segundo a séptimo de básica.
El inicio del año lectivo en agosto, explicó a El Mercurio Joana Abad, coordinadora del Ministerio de Educación para la zona 6, se debe a un ajuste para cumplir, por un lado, con los 200 días de actividades académicas, y, por el otro, para que los profesores tengan sus 30 días de vacaciones ininterrumpidas tal y como se dispone en las reformas a la LOEI.
Metodología trimestral
Una vez que los estudiantes regresen a las instituciones educativas, los profesores deberán empezar a cumplir con sus planificaciones trimestralmente. El cambio de quimestre a trimestre obedece a un mayor control del aprendizaje del estudiante, ya que, con las reformas a la LOEI se dispuso que se eliminen los exámenes remediales y de gracia.
Con la vuelta de los trimestres, lo que busca el Ministerio de Educación es que los profesores identifiquen de manera temprana las limitaciones de aprendizaje que tienen los estudiantes para remediarlos a tiempo y evitar que termine en un supletorio.
Para eso, en cada trimestre habrá una evaluación y dos procesos de recuperación de conocimientos, en caso de ser necesario. Es decir, en el año lectivo los estudiantes tendrán hasta seis oportunidades para nivelarse.
Sobre esta metodología opinó el rector y docente de la Escuela 12 de Abril, Pedro Calle. Para el maestro, si bien es necesario buscar nuevas estrategias para mejorar la calidad educativa que ayude a los niños y adolescentes, los profesores tendrán que prepararse para cumplir con los lineamientos.
“Este año lectivo está por terminarse. Luego de eso tenemos que sentarnos a revisar los lineamientos y prepararnos para el nuevo año que comenzará más pronto. Los profesores debemos estar listos para el 22 de agosto”, dijo Calle.
Por su parte, para Érica Bustamante, ex maestra del sistema público, el volver a la metodología trimestral es una apuesta que deberá ser revisada constantemente, tanto para los estudiantes como para los profesores.
“Lo que se busca siempre es que los estudiantes aprendan. Esperemos que funcione. También esperamos que no sea una carga de actividades y papeleos para los profesores. El tiempo dirá si volver a los trimestres es una buen apuesta”, opinó Bustamante. (I)
