Estos últimos seis días, el centro de Cuenca se ha llenado de los colores del Corpus Christi, la fiesta religiosa septenaria que hoy llega a su fin tras una serie de eventos que ha sacado sonrisas y ha entretenido a chicos y grandes.
Las eucaristías, que han dado paz a los creyentes; los castillos y los cohetes, que han iluminado las noches y ha alegrado a propios y extraños de Cuenca; y los dulces, que han zaceado a los que disfrutan de las golosinas.
Cada elemento del Corpus ha atraído a las personas, a tal punto que se ha visto un incremento de visitantes con respecto a las tres últimas ediciones que tuvieron restricciones por la pandemia.
“La verdad es que se ha visto a mucha gente en el Corpus. Nos ha ido bien en las ventas. Gente, principalmente de la Costa, ha llegado en las noches. Ha sido mejor que el año pasado. Esperamos que la fiesta siga recuperándose”, comentó Verónica Ávila, vendedora de dulces.
Y es que las golosinas han vuelto a ser una de las atracciones principales de la fiesta septenaria, que este año ha convocado a las comerciantes ya tradicionales, así como a las nuevas generaciones.
Este último caso se puede observar en Adrián Córdova, quien, por primera vez salió a vender dulces en el Corpus de este año.
Para él, las mejores ventas se han registrado el fin de semana. Ahora espera lo mismo este viernes, sábado y domingo, debido a que, si bien la fiesta religiosa termina hoy, la comercialización de dulces en los alrededores del Parque Calderón se mantendrá hasta el 18 de junio.
“Esperamos que más gente venga el fin de semana y podamos mejorar nuestras ventas. Es la primera vez que salimos a vender dulces, estamos aprendiendo. Ha sido una linda experiencia porque mucha gente pasa por aquí para disfrutar de la fiesta”, dijo Córdova a El Mercurio.
Feligreses vuelven a la fiesta
Los creyentes también se han volcado a las calles y a la Catedral Nueva para participar en las procesiones y las eucaristías previas a la quema de los castillos por parte de los priostes.
De acuerdo a datos de la Arquidiócesis de Cuenca, diariamente, alrededor de 1.500 personas han participado en la eucaristía de las 19:00 en la Catedral Nueva. Es decir, hasta ayer, unas 9.000 personas estuvieron presentes en la misa principal del Corpus.
“Para nosotros el Santísimo tiene un significado especial. Acá venimos a pedir por nuestras familias, por la salud, por un futuro mejor. Esperamos que esta tradición de los cuencanos no se pierda, que siga, que los devotos no falten”, opinó Raquel López, quien ayer asistió a la misa de la mañana.
Hasta hoy, tanto los creyentes y los seguidores de los castillos y la pirotecnia tendrán la oportunidad de disfrutar de la noche religiosa y cultural que ofrecerá el Corpus Christi.
Para el cierre habrá una eucaristía a las 19:00, luego de ello se dará paso a una procesión y, por último, la Policía Nacional, la Gobernación del Azuay y la Asociación de Colegios Profesionales del Azuay serán los encargados de encender los últimos castillos de este 2023. (I)
