“Es el cuarto más importante prócer de la Independencia Sudamericana junto a San Martín, Bolívar y Sucre”. Esa fue una de las frases que Rodolfo Hugo Castro, cónsul general del Perú, utilizó ayer para destacar la figura del cuencano Mariscal José Domingo de La Mar de Cortázar en el marco del bicentenario (200 años) de la Batalla de Ayacucho.
Un evento especial se desarrolló en la Casa de la Provincia, porque allí está un monumento en su honor, para recordar su trayectoria, importancia en la gesta libertaria y en lo político. Llegó a ser presidente del Perú por dos ocasiones.
La vida del Mariscal La Mar
El encuentro sirvió para revivir su historia, quien nació un 12 de mayo de 1776 en lo que hoy es el edificio de la Alcaldía de Cuenca que se ubica en la calle Bolívar y Borrero. Fue hijo de Marcos de La Mar, funcionario español que era el responsable de las cajas reales, y, de Josefa de Cortázar, quien pertenecía a una de las familias aristocráticas de Guayaquil.
Estudió en España en el Colegio de Nobles de Madrid y en la Academia Militar. En su vida obtuvo las distinciones de capitán, subinspector general del Virreinato Peruano, y de mariscal de campo.
Fue San Martín, quien lo persuadió para que en el año de 1821 se una a las fuerzas libertarias. Bolívar lo nombró general y jefe de la División Peruana del Ejército Unido del Perú para así convertirse en un baluarte, especialmente en dicha Batalla de Ayacucho de 1824.
Para Castro, es un personaje que influyó en los dos países hermanos, aunque, antes de la firma definitiva de los acuerdos de paz, era visto como alguien controversial para el Ecuador. “Hoy la figura de este ilustre hijo de Cuenca demanda una mirada aliente, objetiva y pragmática para reconocer en él a un rotundo personaje que nos une antes que separarnos”, aseveró.
Aeropuerto y calle lleva el nombre de La Mar
El aeropuerto y una de las calles principales del casco urbano llevan el nombre de Mariscal La Mar. Sin embargo, hay personas que aseguran que la ciudad le debe más honores por su trayectoria libertaria para la región.
Esteban Coello, venerable maestro de la Respetable Logia Simbólica José Domingo La Mar N 30, cree que por temas políticos de los últimos años se ha malinterpretado la historia referente al Mariscal La Mar, quien aportó en gran medida al Perú lo que generó que se vea mal para el Ecuador.
Añadió que tuvo ideas de libertad para todos los países de Sudamérica para dar fin a la opresión española. “Cuenca y el país tienen que reconocer mucho más al Mariscal La Mar por su valía”, citó Coello.-(I)
Proyecto que unirá norte y sur
El Gobierno Provincial del Azuay aprovechó ayer, del acto de reconocimiento a la figura de Mariscal La Mar, para hablar sobre un proyecto bastante novedoso para unir y hermanar lo que fue el imperio del Tahuantinsuyo. La idea es que, mediante la reconstrucción, enlazar diferentes sitios arqueológicos.
Juan Cristóbal Lloret, prefecto del Azuay, se refirió a esto enumerando algunos sitios iniciales que estarían involucrados como: Ingapirca (Cañar), Dumapara (Nabón), Chobshi (SígsIg) y Paredones (Cuenca) para simbolizar la Cruz del Sur. “Hay que profundizar nuestros vínculos y lazos de amistad entre el sur de Ecuador y el norte de Perú”, citó Lloret.
Este proyecto, al que se espera se sumen otros gobiernos seccionales, se tendrá que ejecutar por etapas y tomará su tiempo considerando la magnitud. -(I)
DETALLES
2 placas se entregaron en el acto desarrollado en la Casa de la Provincia para el Cónsul del Perú y la Prefectura del Azuay por haber resaltado la figura de Mariscal La Mar.
La Respetable Logia Simbólica José Domingo La Mar N 30 es un grupo de hermanos masones que se creó hace 35 años. Se dedican a trabajar por ideales de libertad, igualdad y fraternidad.
La Batalla de Ayacucho se dio un 9 de diciembre de 1824 en Perú. En tal virtud, ayer se cumplió el bicentenario (200 años) de dicha gesta libertaria en el vecino país del sur.
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