Pelé y Maradona, la memoria de dos grandes que ya no están
Fueron dos de los más grandes jugadores de la historia del fútbol, hasta el punto de que protagonizan la eterna discusión sobre cuál fue el mejor -aunque desde el 18 de diciembre se les podría sumar Lionel Messi al agregar el título que le faltaba-.
Pero Pelé y Maradona nunca compitieron en vida.
Edson Arantes do Nascimento ´Pelé´, fallecido este jueves, tenía dos décadas de vida más que Diego Armando Maradona, quien murió poco después de cumplir los 60, por lo que no llegaron a coincidir en sus carreras deportivas.
‘El Diego’ debutó con Argentinos Juniors el 20 de octubre de 1976, apenas un año antes de que el brasileño dijera adiós el 1 de octubre de 1977 en el New York Cosmos estadounidense.
Solo un par de años después, se conocieron personalmente. Fue el 9 de abril de 1979 en Río de Janeiro, gracias a la mediación de la revista argentina El Gráfico.
En aquella hora de charla entre el tricampeón del mundo y la joven promesa, hubo risas e incluso tiempo para tocar la guitarra.
Pese a no ser contemporáneos, protagonizaron diversos momentos de enfrentamiento dialéctico, algo que, cuando falleció el ‘Pelusa’ el 25 de noviembre de 2020, ‘O Rei’ trató de desmentir afirmando que su compañero en el Olimpo del fútbol era «incomparable».
Solo 12 meses después, por medio de sus redes sociales y con motivo del primer aniversario de la muerte de Maradona, llegó a escribir: «Un año sin Diego. Amigos para siempre».
En sus últimos días de vida, tras la infartante victoria de la Albiceleste en el Mundial de Qatar 2022, Pelé alcanzó a felicitar a Argentina y, en medio de la algarabía sudamericana por la recuperación del título 20 años después, aún tuvo un recuerdo para él, según el imaginario colectivo, rival deportivo: «Seguramente Diego estará sonriendo ahora».
Pelé vs Maradona
Diecinueve temporadas en el Santos brasileño y tres más en el Cosmos, donde colgaría las botas, 1.284 goles entre los clubes y la ‘Verdeamarela’, 2 Copas Libertadores, 2 Copas Intercontinentales y campeón en tres ocasiones del Mundial con Brasil (1958, 1962 y 1970), además de numerosos reconocimientos individuales, sitúan a Pelé en el podio de la historia del fútbol.
Maradona ganó un Mundial, el de 1986, pero en él firmó el que pasó a la historia como ‘el gol del siglo’, tras regatear a cuanto rival inglés tuvo enfrente antes de anotar en el duelo de cuartos de final que también se recordará eternamente por el tanto de ‘la mano de Dios’.
A esto le sumó la Copa del Rey, la Copa de la Liga y la Supercopa de España con el F.C. Barcelona, y sus logros más destacados: dos Ligas, una Copa, una Supercopa y una Copa de la UEFA con el Nápoles, un equipo del depauperado sur de Italia al que levantó de su modestia para llevarlo a competir con los grandes de Europa.
De personalidades y estilos de juego diferentes, Pelé y Maradona nunca rivalizaron en los terrenos de juego porque no coincidieron en ellos y hasta finales de los años 90 el brasileño era el ‘Rey’ indiscutible del balompié.
Pero en diciembre de 2000 la FIFA eligió al mejor jugador del siglo y, como muchas veces ocurre entre lo académico y lo popular, el organismo se quedó con Pelé y el público votó a Maradona.
A partir de ahí, hubo amargos cruces de declaraciones entre ellos sin que quedase muy claro si el duelo era personal o tenía más que ver con la rivalidad clásica entre los dos gigantes de Sudamérica, Argentina y Brasil.
Pese a todo, en 2005 compartieron balón ante las cámaras de televisión. Maradona conducía un programa y Pelé fue invitado a lo que se llamó ‘el encuentro del Rey con Dios’. Para delirio del público, que nunca pudo verlos juntos en una cancha, ambos sostuvieron en el aire la bola durante varios minutos cabeceando.
Cuando murió ‘el Pelusa’, uno de los mensajes más emocionantes fue el difundido por Pelé, quien escribió: «Mi gran amigo, muchas gracias por todo nuestro viaje. Un día en el cielo jugaremos juntos en el mismo equipo«.
Ahora, que ‘O Rei’ falleció después de un mes internado en un hospital de Sao Paulo, Pelé y Maradona podrán jugar juntos en el cielo. EFE