Chordeleg invierte USD 2,5 millones en planta de tratamiento de aguas residuales; beneficiarios serán alrededor de ocho mil personas.
Chordeleg trata de disminuir los niveles de contaminación en quebradas y en el río Santa Bárbara con la construcción de dos interceptores y la planta de tratamiento de aguas residuales para la cabecera cantonal y la periferie. El proyecto -que presenta un avance del 75 %- estará listo el próximo mes de mayo.
En septiembre de 2019 la administración municipal firmó un contrato de crédito con el Banco de Desarrollo del Ecuador (BDE) por cerca de 2,1 de los 2,5 millones de dólares requeridos para la obra (la diferencia la pone el Cabildo). Sin embargo, los trabajos recién iniciaron a fines de noviembre de 2021; es decir, luego de dos años debido a la pandemia de la COVID-19 y otros procesos de carácter administrativo y legal.
La contratista tenía casi un año para terminar la obra, pero las constantes lluvias, el paro nacional de junio y trabajos complementarios provocaron que el Ayuntamiento prolongue -sumando las ampliaciones- por seis meses más el plazo del proyecto.
La administración está por autorizar un contrato complementario por unos 169 mil dólares para rubros no previstos inicialmente en el contrato como estabilización de taludes, cambio de material de obra, entre otros.
Características
Los interceptores se ubican, uno desde el sector Tamaute hasta Las Cuadras para recibir todas las descargas de la zona; y el otro, desde la avenida 15 de Abril hasta Tamaute.
La planta de tratamiento está emplazada en el sector Las Cuadras en una área de alrededor de 2,5 hectáreas (ha.). Este predio fue adquirido por la administración municipal mediante una declaratoria de utilidad pública.
Se caracteriza por estructuras de entrada y pretratamiento de las aguas servidas, reactores de flujo orbital, cementadores secundarios, biodigestor de lodos, canal de desinfección con filtros UB, entre otros elementos. Asimismo, consta el acceso a la planta, muros de protección, cerramientos y más.
Para César Galarza, director de agua potable y alcantarillado del Municipio, los primeros beneficiarios serán alrededor de ocho mil personas, pues la intención es alcanzar a futuro unos diez mil cuando se empate el alcantarillado con algunos usuarios que solo tienen por el momento el servicio de agua potable.
“El objetivo es mejorar la calidad de las aguas residuales. La falta de una planta de tratamiento ha hecho que todas estas aguas se descarguen a cielo abierto en cauces y quebradas que llegan a dar al río Santa Bárbara”, aseguró Galarza. Chordeleg.- (I)
Preocupación por retraso en construcción
Los habitantes del centro cantonal y de los sectores periféricos coinciden en que la construcción de los dos interceptores y la planta de tratamiento es la principal obra de saneamiento ambiental del cantón. Aunque están preocupados por el avance de los trabajos debido a los retrasos.
De acuerdo con Edgar Jara, presidente del barrio Cazhalao, el proyecto permitirá la descontaminación del ambiente para cuidar el río Santa Bárbara. “Las aguas se purificarán, no al ciento por ciento, pero disminuirán sus impurezas. Creo que todos los cantones deberían ejecutar obras similares”, dijo.
De su lado, Marco Marín, presidente de la calle Atahualpa, señaló que pese a los retrasos existe expectativa porque el proyecto entre lo más pronto en funcionamiento. “Hay que ser responsables en devolver una agua limpia al ambiente”, aseveró. (I)
Frase
“Al no contar con una planta de tratamiento de aguas residuales en el cantón todo se descarga a cielo abierto, principalmente por las quebradas que van a dar al río Santa Bárbara. Queremos evitar la contaminación del afluente”
César Galarza, director municipal de agua potable y alcantarillado.
Detalles
– 4 años aproximadamente lleva el proyecto. El contrato del crédito se suscribió en el 2019 y los trabajos iniciaron en el 2021.
– Los recursos para el proyecto se destinan, a más de la obra física, civil y la fiscalización, en programas de fortalecimiento institucional y de promoción de los servicios que brindará a los ciudadanos.
– Los interceptores y la planta de tratamiento beneficiarán a los barrios del centro cantonal, además de sectores periféricos como Llaver, Cazhalao, entre otros.
