“No dejarse vencer. No hay obstáculos para cumplir los sueños”. Esa es la convicción de Katherine Crespo, de 20 años, quien presenta una discapacidad física y un grado de parálisis cerebral. Hoy, ella se convierte en un referente de superación.
El 12 de julio próximo, recibirá el título de bachiller y desde ya su prioridad es el ingreso a la Universidad. Ella es una de las mejores egresadas en la Unidad Educativa Benigno Malo.
Concentrada en el leer un libro de poemas escrito por su madre Tania Álvarez, la joven estudiante recibió a El Mercurio en su hogar. La acompañaron sus hermanos y su orgulloso padre. Katherine terminó sus estudios en mayo, ya que por haberse exonerado en algunas materias no tuvo que presentar proyecto de grado.
Durante este tiempo se ha dedicado a buscar ofertas para la universidad y, según su madre, en la medida de lo posible continuará apoyándola a que cumpla su sueño de convertirse en escritora. “Quiere estudiar en la universidad la carrera de Lengua y Literatura”.
No hay límites
Katherine nació con cuadriplegia espástica, que consiste en una parálisis cerebral, pero eso no fue impedimento para que en la Unidad Educativa en la que se preparó obtenga las mejores calificaciones.
Álvarez contó que, durante la educación su hija, ella fue quien la asistió. “Permanecía fuera del aula mientras ella adentro recibía las clases junto con su hermano que también egresó en la misma institución”.
Agregó que Erick, quien tiene 17 años, fue su compañero de aulas. “Él ha sido su apoyo para cumplir con las tareas en clase, aunque también Katherine formó un vínculo fuerte con sus compañeros”.
Tal ha sido la abnegación de su madre, que la acompañó en todos los recesos. Estuvo ahí hasta que termine cada jornada de clases para trasladarla a su hogar, así lo recordó Ruth Castro Calle, rectora (e) del plantel, quien además comentó que Katherine es una niña con promedio de 9.40 para arriba.
Erick, otro ejemplo de superación
Al igual que Katherine, Erick Taday, de 21 años, obtuvo un promedio de 9,57. Èl tiene un 45% de discapacidad intelectual y culminó el bachillerato con honores en una institución de régimen especial. Fue escolta del Pabellón Nacional y tiene en mente continuar una carrera técnica.
Erick apunta a seguir Gastronomía y espera ser elegido para estudiar en el taller que ofrece el Municipio de Cuenca en la Casa de Oficios. “Me gusta cocinar y quiero aprender a hacer platillos típicos”.
Su madre, Zoila Taday, comentó que su hijo al igual que su hija mayor, quien también tiene discapacidad del 55%, formaron parte del cuadro de honor de la institución.
“Estoy orgullosa de ellos, porque desde pequeños aprendieron a desenvolverse solos. Ahora voy a apoyarlo a que estudie lo que él quiere”, comentó la madre.
Erick y Katherine son parte de los 157 estudiantes con necesidades educativas específicas asociadas a una discapacidad que culminan el bachillerato en la zona 6 del Ministerio de Educación que comprende Azuay, Cañar y Morona Santiago.
Esta cartera de Estado, a través de su programa ‘Todos’, promueve una educación integral e inclusiva para estudiantes con necesidades educativas especiales vinculadas o no a una discapacidad.
El bachillerato no es el final
Los maestros en las aulas inclusivas deben incorporar una variedad de métodos de enseñanza con el objetivo de llegar mejor a los estudiantes de diferentes capacidades de aprendizaje.
Así lo define Alejandra Arteaga, especialista en Inclusión Educativa quien sostiene que las instituciones educativas de régimen especial trabajan con el currículo nacional realizando adaptaciones a las necesidades de los jóvenes con discapacidad.
Esto, según la especialista, debería continuar para que los bachilleres con discapacidad logren una educación superior. Sin embargo, muchos no la tienen por falta de recursos u otras razones.
“Algunos prefieren estudiar carreras técnicas, o incluso sus padres apoyan para que se desempeñen en algún trabajo”, concluyó.
Frase
“No hay limitaciones para obtener un mejor futuro. Estudien y cumplan sus sueños”
Katherine Crespo
bachiller
Dato
157
estudiantes con discapacidad culminaron el bachillerato en la zonal 6 del Ministerio de Educación.
