Miryam Núñez sueña con el Mundial y con llegar a los Juegos Olímpicos
La ciclista ecuatoriana Miryam Núñez resaltó ayer que su objetivo y sueño inmediato será tener una destacada participación en el Mundial de ciclismo de ruta que se disputará en Glasgow (Escocia), el próximo 5 de agosto, y también en clasificar para los Juegos Olímpicos de París 2024.
«Tras una muy buena preparación en la altura de Ecuador, tengo una expectativa bastante buena para el Mundial y también para sumar puntos de clasificación para los Juegos Olímpicos» de París 2024, señaló Núñez durante una rueda de prensa en Quito, situada a 2.800 metros sobre el nivel del mar.
La ciclista del equipo español Massi Tactic resaltó el trabajo desarrollado, especialmente en el último mes, junto a su entrenador Javier Solá y el «apoyo fundamental» de las empresas locales tanto en su preparación como para las competiciones internacionales.
Núñez reconoció que haber ganado la Vuelta ciclística de Colombia en el 2020 le dio un gran giro a su carrera deportiva profesional.
También reconoció los momentos críticos que le ha tocado vivir, como el accidente que sufrió en febrero del 2022, ocasionado por la imprudencia del conductor de un vehículo, mientras se entrenaba en la autopista General Rumiñahui, de la capital ecuatoriana.
Núñez, natural de la ciudad andina de Riobamba, anticipó que el Mundial de Glasgow se encontrará con la élite del ciclismo mundial.
«Varias rivales ahora mismo están participando en el Tour de Francia, pero soñar no cuesta nada y voy con la seguridad de demostrar el nivel alcanzando durante esta preparación», indicó.
La ciclista de 28 años aseguró que, tras el Mundial, se concentrará con su equipo en España, donde tendrá varios eventos.
«Después esperaré la confirmación de la Federación Ecuatoriana de Ciclismo (FEC) para ver si seré parte de los Juegos Panamericanos» de octubre próximo en Chile.
Para Núñez, el apoyo de la empresa privada sigue siendo fundamental para cumplir sus sueños, y que nunca se confió de quienes le prometieron tantas cosas, porque «todo quedó en promesas no cumplidas».
«Mi afán es dejar un legado, especialmente a la mujer ecuatoriana, mostrando que sí se puede», concluyó. Quito.- (EFE)-(D)
