Los avances en Ciencia y Tecnología cada vez son más rápidos, todos los días nos enteramos de aplicaciones tecnológicas nuevas que irrumpen nuestras vidas, sin embargo, de manera irónica esos mismos avances pensados en facilitar la vida, se han convertido en barreras y grandes brechas entre unos y otros. Las aplicaciones están ahora en todo, incluso en cadenas de comida que ahora ya no tienen personas tomando la orden, sino máquinas de lo más frías; cuyo software muchas veces no entiende lo que queremos, y esto pasa en los turnos on line para citas médicas o documentos oficiales, en pagos e incluso en compras en donde hay un robot contestando, como alguien dijo “asistimos a una digitalización y robotización de todo, siendo todavía análogos”. Frente al panorama nos resta seguir investigando y aportando desde la academia para la alfabetización digital y para humanizar la tecnología, siempre pensando que la centralidad es el ser humano y su comunicación. (O)
