Ana Gomezcoello promueve la danza aérea con tela en el Complejo Bolivariano
Hace 6 años Ana Gomezcoello empezó a practicar danza aérea con telas. Lo hizo de forma recreativa, para liberar tensiones, estrés… Los resultados físicos, mentales y espirituales que experimentó la llevaron a generar un espacio para la gente a costos accesibles.
La danza aérea tonifica el cuerpo, aumenta la fuerza en brazos, piernas y abdomen porque utiliza la musculatura para ejecutar las diferentes posturas.
Ya que gran parte de los movimientos tienen estrecha relación con la danza, la gimnasia y el ballet, la persona mejora su elasticidad y flexibilidad. No hay género ni edad que limiten su práctica.
Como toda actividad requiere esfuerzo, disciplina y el deseo de aprender para mejorar el estilo de vida. “Trabajamos mucho las formas, las líneas, la estética. Visualmente es muy atractiva, físicamente es bastante completa. El trabajo es integral, desde los dedos de los pies hasta nuestra cabeza”.
Los niños ejecutan sus acrobacias en telas suaves y elásticas a fin de que su adaptación a la actividad sea más rápida y amigable. A medida que se avanza de nivel, “se trabaja con telas más rígidas que nos permiten ganar fuerza y armar figuras a mayor altura”.
Gomezcoello imparte clases en el gimnasio de lucha olímpica de la Federación Deportiva del Azuay. La sesión dura una hora.
A los principiantes les recomienda clases de dos a tres días a la semana. Los de nivel avanzado necesitan practicar a diario para perfeccionar sus rutinas y elevar aún más su nivel.
La vestimenta debe ser cómoda. La entrenadora recomienda manga larga y un pantalón que cubra hasta los tobillos para prevenir laceraciones por el roce con la tela.
No está permitido uñas largas, así como aretes o pulseras que puedan agarrarse a la tela y provocar algún accidente.
Detalles
- Los practicantes pueden elegir horarios en la mañana de 10:00 a 12:00; en la tarde y noche de 17:00 a 19:00. Los interesados pueden contactarse al 0999866894.
- En las sesiones se utiliza diferente género musical, según la finalidad de la rutina. Hay momentos en que se puede meditar en las telas; otros en que se puede liberar energía.