Se cancela el triatlón de los Juegos Olímpicos debido a la contaminación del río Sena
El río Sena es protagonista de dos de los más grandes desafíos que se planteó la organización de los Juegos Olímpicos París 2024. El primero, garantizar la seguridad en la ceremonia inaugural, fue superado con éxito el pasado viernes y el segundo, todavía deber esperar: se canceló el triatlón masculino.
Hace un siglo que nadar en el agua de uno de los ríos más emblemáticos de Europa está prohibido y la apuesta para estos Juegos Olímpicos, justamente 100 años después del organizado por la capital francesa por última vez, es que sea el escenario del triatlón y la competencia de aguas abiertas. Un desafío arriesgado y con una condición imposible de controlar más allá de las obras realizadas: el clima.
La previa ya venía mal los últimos dos entrenamientos que debían realizar los triatletas se tuvieron que suspender debido a que el agua no cumplía las condiciones necesarias para nadar, según el estudio que se realizó el domingo.
“No ofrecen garantías, la prioridad es la salud de los atletas”, explicó el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de París (COJOP) junto a la Federación Internacional de Triatlón.
En la madrugada del martes 30 de julio del 2024, en París se volvieron a realizar estudios y confirmaron que las condiciones no están dadas para que se pueda desarrollar la competencia. En caso de que este miércoles tampoco se puede nadar, se intentaría hacer el viernes.
La lluvia es el principal enemigo. Es que cuando aumenta el caudal en el Sena por las precipitaciones, las cloacas desbordan y se acaban vertiendo al río sin pasar por las depuradoras, lo que eleva el nivel de la contaminación por las bacterias fecales.