El 27 de junio de 2024, a través del portal de Compras Públicas, la EMAC adjudicó un contrato para el «control de fauna canina en el Relleno Sanitario de Pichacay y su área de influencia». Dicho contrato ha elevado un debate, porque en él se especifica un control de perros ferales que puede terminar en el sacrificio de los animales.
A través de comentarios públicos, sobre todo de activistas y defensores de los animales, se ha juzgado esta medida.
Mientras que, de su lado, representantes de la EMAC y de la Comisión de Gestión Ambiental (CGA) del Municipio de Cuenca, han defendido el control de la fauna canina.
¿Por qué la EMAC quiere controlar la presencia de perros?
El contrato que se adjudicó a finales de junio partió de una serie de eventos que han ocurrido en los alrededores del relleno sanitario en Pichacay, en El Valle.
Según la EMAC, es necesario controlar la «fauna canina y felina» en el relleno sanitario y en su área de influencia porque se han detectado jaurías, cuyos integrantes han atacado, principalmente, a los animales.
Las jaurías, explicó a El Mercurio Carlos Orellana, director de la CGA, se han comido borregos, pollos y becerros pequeños.
El objetivo del control, aclaró María Caridad Vásquez, gerenta general, no es sacrificar a los perros. Esta acción sería la última de un proceso que, una vez se adjudicó el contrato, lleva adelante un especialista de la Universidad de Cuenca.
¿Cuál es el proceso?
Vázquez explicó que el especialista hace un seguimiento a los perros que, se cree, podría ser unos 400 que están en el relleno sanitario y en sus alrededores.
Una vez que se los identifican se analiza si pueden ser esterilizados, si son agresivos, si se pueden ser vacunados.
Asimismo se toma una muestra de sangre para analizar si tiene enfermedades.
Con todos estos datos, a más de pruebas de vídeo, según la gerenta de la EMAC, se hace un informe y se toma la decisión de si el animal tiene que sacrificarse.
«No se puede, como dicen las denuncias, matar a los perros. Eso sería una locura. Eso es absurdo… No es permitido en la ley, y luego sería absolutamente antiético pensar que un grupo de personas está queriendo hacer esto», dijo Vázquez.
¿Qué dice la ley?
Cuenca tiene una ordenanza para el control y manejo de la fauna urbana y la protección de animales domésticos.
En su artículo 55 se especifica que, el único método permitido y aprobado para provocar la muerte de un animal considerado como fauna urbana es la eutanasia. Siempre y cuando se den siete condiciones, entre estas:
- Cuando no pueda ser tratado por tener una enfermedad terminal e incurable
- Cuando esté en sufrimiento permanente físico
- Cuando sea determinado como potencialmente peligroso por un profesional en el área debidamente acreditado
- Cuando sean declarados como parte de una jauría salvaje
Por ahora, el contrato del control se mantiene en Cuenca. La EMAC dijo que ya ha habido reuniones con aquellas personas que se han acercado para hablar del proceso que se está llevando a cabo.
María Caridad Vázquez agregó que la EMAC está presta a explicar sobre cómo se está realizando el control. Sobre si ya se ha hecho algún sacrificio de los animales identificados, dijo la mañana de este 11 de diciembre, que desconocía. (I)