Por la suspensión del servicio de agua potable, desde ayer, en el norte y este de Cuenca, los primeros en recibir el líquido vital en tanqueros fueron los subcentros de salud de las parroquias El Valle y Ricaurte.
Luego fue el hospital José Carrasco Arteaga, del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), que es uno de los dos establecimientos de salud públicos en esta ciudad que atiende a pacientes con Covid-19.
Después estuvieron el subcentro de salud del sector de La Uncovía; el hospital del Niño y la Mujer; y la Asociación Pro Bienestar de la Familia Ecuatoriana (APROFE).
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En la lista también constaban otras casas asistenciales como la clínica Médica del Sur; la clínica La Paz y el subcentro de salud, ubicado en la avenida Yanahurco y 13 de Abril.
El agua fue entregaba en vehículos de la Empresa de Telecomunicaciones, Agua Potable y Alcantarillado (ETAPA EP); del Municipio de Cuenca, y del Cuerpo de Bomberos de Cuenca.
Poco después de las 08:30 una motobomba de la institución bomberil se ubicó junto al parque central de la parroquia Ricaurte. Los bomberos asistieron con tres vehículos, con una capacidad de 5.000 galones (gal).
Fabián Cazar, gerente de Agua Potable, de ETAPA EP, explicó que tienen previsto que el corte de agua sea hasta las 09:00 y desde esa hora que se reestablezca progresivamente el suministro.
La suspensión del servicio se debe a que se detuvo la producción en la Planta de Potabilización de Tixán, para conectar una nueva conducción de agua cruda.
Cazar indicó que en algunos casos el agua puede llegar con cierta turbiedad a las casas porque aprovecharán esta interrupción programada para hacer labores de limpieza.
Refirió que esto no significa que el líquido esté contaminado y que esto afecte a la salud, pero lo recomendable es dejar que fluya por unos minutos hasta que recupere su condición normal.
Para esta jornada está previsto también tanqueros que harán recorridos para dotar del agua a las viviendas en donde tarde en reanudar el servicio, especialmente, porque están en zonas altas.
Milton Muñoz, dirigente barrial de la parroquia Ricaurte, indicó que en la socialización previa a este corte, ETAPA EP les informó que esta suspensión era necesaria para garantizar el agua por 30 años más.
“Nos llamó la atención que justo en una pandemia se dé un corte de agua, si es cuando el agua más se necesita, pero nos explicaron que es una obra necesaria y hasta urgente…”, mencionó.
El pedido puntual de Muñoz es que en este día se garantice el agua en los tanqueros, especialmente, para la preparación de alimentos y actividades de aseo. (CSM)-(I)
CIUDADANÍA
A Blanca Bueno la suspensión del servicio de agua potable de la Empresa de Telecomunicaciones, Agua Potable y Alcantarillado (ETAPA EP) le tomó por sorpresa. Vive en el sector de Las Orquídeas.
Y es que ella llegó la madrugada de ayer a Cuenca desde Guayaquil por lo que no estuvo enterada de los anuncios hechos por ETAPA EP, del Municipio de Cuenca.
Ella tuvo que acudir a la casa de sus hijas, en la vía a Patamarca, para abastecerse del líquido vital, pues allí da este suministro la Junta Administradora de Agua Potable y Saneamiento Regional Patamarca.
Y esta fue una opción para varias familias que viven cerca de este sector ante esta suspensión programada.
