Las procesiones fueron reemplazadas por un sobrevuelo y un recorrido en el Papamóvil.
El grupo Hermano Miguel considera que el Pase del Niño viajero mueve a unas 70.000 personas en caravanas que se se extienden desde San Joaquín hasta el Parque Calderón y que tardan hasta 10 horas en pasar todas por la Catedral, pero este año la multitud se quedó en casa.
El festival “Quinto Río” cuyo nombre se toma como una referencia del río de gente que cada 24 de diciembre se toma la calle Bolívar de esta Cuenca de los 4 ríos, reemplazó a las caravanas. Lo hizo de forma virtual a través de videos que fueron enviados por los fieles desde sus casas.
Las comparsas y los niños revestidos de “mayorales”, cholas cuencanas, la Sagrada Familia, reyes magos o pastores se volvieron virtuales para evitar contagios por la pandemia, en esta nueva normalidad que también cambia las tradiciones.
El Pase del Niño fue cambiado por un paseo del Niño Viajero en el Papamóvil, el vehículo que uso el Papa Francisco en su única visita al Ecuador y que en esta ocasión acogió a la imagen para que pueda visitar a sus fieles sin que ellos tengan que exponerse al virus.
Antes, una avioneta le dio un paseo por el cielo cuencano, para que desde sus balcones y techos los fieles de aquellos rincones de la ciudad que no fueron incluidos en el recorrido puedan también recibir la visita del ‘Niñito’.
En la jornada previa la imagen ya recorrió la ciudad en un sobrevuelo en helicóptero, acompañado por globos, aplausos y saludos de los fieles desde las terrazas e iglesias por las que pasó de cerca.
Tras el viaje, el Niño tuvo una misa en la Catedral Nueva, también con restricciones para que el aforo no supere lo indicado por el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional.
El grupo Hermano Miguel fue el encargado de acompañar a la imagen hasta el altar, lo hicieron vestidos de cholos y cholas cuencanas, emulando a la Sagrada Familia pero con personajes propios de nuestra ciudad.
Henry Vera, integrante del grupo, comentó que este año se inspiraron en un cuadro que mantienen en el Santuario de El Carmen, que muestra cholos y cholas cuencanas bailando alrededor del Niño.
Tras la misa, el Niño inició su recorrido por 21 sectores de Cuenca que en principio incluían los mercados 10 de Agosto, 3 de Noviembre, 9 de Octubre y 12 de Abril, cuyos comerciantes son priostes de la fiesta, pero a última hora la Arquidiócesis prefirió omitir estas visitas para evitar aglomeraciones.
Por primera vez el Niño Viajero estuvo en barrios como Totoracocha, Monay, El Paraíso, la parroquia Yanuncay, el Control Sur, El Cebollar, Racar, y El Tejar, su recorrido le permitió visitar sitios en los que no había estado antes y donde sus fieles le recibieron con cariño.
Tras el recorrido, el Niño Viajero retornó al Santuario de El Carmen, un espacio que es su hogar durante todo el año y donde permanecerá hasta el próximo 24 de diciembre ya que si bien la Arquidiócesis había programado que permanezca en la Catedral Nueva para que los feligreses puedan visitarlo, esta opción también se desvaneció con el estado de excepción.
El Pase del Niño, una de las tradiciones de mayor aglomeración en Cuenca, este año no formó el “quinto río” de gente, no reunió a los feligreses de la ruralidad, no hubo fundas de caramelos o regalos desde las caravana, pero sí estuvo presente la fe y la esperanza de que el próximo año traiga salud y paz.
DATOS
Este año el Niño Viajero hizo 2 sobrevuelos, el primero en un helicóptero de las Fuerzas Armadas y el segundo esta mañana en una avioneta.
La misa se hizo con restricciones en cuanto al aforo, el grupo Hermano Miguel fue el encargado de una representación de la Sagrada Familia.
La imagen del Niño Viajero no permanecerá en la Catedral Nueva para evitar aglomeraciones de quienes deseen visitarlo en la Navidad.
CIFRAS
21 sectores de la ciudad fueron visitados por el Niño Viajero durante su recorrido que reemplaza a la tradicional pasada.
87 años de tradición cumple este año el Pase del Niño según datos de la Arquidiócesis de Cuenca, esta vez sin comparsas.
70.000 personas asistían anualmente al Pase del Niño Viajero, que se tomaba la calle Simón Bolívar cada 24 de diciembre. (JMM) (I)
