Jhomara Unkuch llegó a Cuenca para dejar en alto a Tiwintza en la Superliga
Jhomara Unkuch nació en Tiwintza, cantón de Morona Santiago. Es una de las referentes de Carneras UPS que el próximo 23 de abril disputará la final única de la Liga Nacional de Desarrollo de Fútbol Femenino U16 en Guayaquil frente a Liga de Quito.
“A los 10 años salí a Macas por estudios y jugaba fútbol en el barrio. Algunos decían: bien Unkuch. Yo no decía nada porque era bien tímida”.
En las pichangas sacaba a relucir su talento entre varones. “Era complicado porque los hombres son muy toscos, pero gracias a eso pude aprender a madurar un poco más”.
A los 13 años su destreza con el balón no pasó desapercibido a los ojos del profesor Rodrigo Lalangui, quien incluso le ayudó con los pasajes para que pueda asistir a los entrenamientos en Río Blanco.
En 2021, a los 16 años debutó en la Superliga Femenina con Liga de Macas. Marcó dos goles en 14 partidos. Es una delantera muy rápida. En sus inicios también fue arquera, pese a que no le ayudaba la estatura y que sus hermanos se oponían a que juegue en esa posición por considerarla peligrosa.
“Mi sueño es llegar a la Selección y que mi mami (Raquel) se ponga contenta y mi papi (Domingo) también”, dice, haciendo un gran esfuerzo por no llorar porque extraña su apoyo y compañía.
“Los primeros días que llegué aquí sufrí full porque extrañaba a mi familia, no me respondían los mensajes, me dejaban en visto y yo decía: ¿se olvidaron de mí?”.
Con el paso de los días se fue acoplando a la Atenas del Ecuador con abrigo de sus nuevas compañeras y en especial de Danna Pesántez “a quien admiro full”.
También tiene una gran consideración a los profesores Santiago Aguirre y Edisson Méndez. El primero le dirige en la U16; el segundo, ya le ha dado minutos en tres partidos de la Superliga, el último fue contra Universidad Católica.
Pese a estar a kilómetros de su tierra natal siempre lleva presente sus orígenes y cuando tiene la oportunidad no duda hablar en shuar y de comer un ayampaco, un plato típico que ayudaba a vender a su mamá mientras hacía los deberes.